l incremento de la esperanza de vida en la
        
        
          población lleva asociado el envejecimiento de la
        
        
          población y también llevará aparejado un aumento
        
        
          del número de permisos de conducir entre el grupo
        
        
          de población de avanzada edad.
        
        
          Actualmente, según datos publicados por la
        
        
          Dirección General de Tráfico (DGT), más de dos millo-
        
        
          nes de personas mayores de 65 años mantienen su
        
        
          permiso de conducir lo que supone el 9,4 % del censo
        
        
          de conductores.
        
        
          El hecho de poder salir a la calle y tener autono-
        
        
          mía en la movilidad no sólo aporta a las personas
        
        
          mayores un medio de desplazamiento, sino que
        
        
          también constituye su principal fuente de actividad física
        
        
          y ejercicio y la principal vía que les permite mantener
        
        
          una vida social activa. Tanto la independencia, como
        
        
          la movilidad y una mayor autonomía son indicadores
        
        
          de calidad de vida en las personas de avanzada edad.
        
        
          Envejecimiento y riesgo de accidente
        
        
          Las personas mayores constituyen el tramo de
        
        
          edad con más víctimas mortales por accidente de
        
        
          tráfico junto con los jóvenes de 25 a 34 años, y por
        
        
          delante de los jóvenes de 15 a 24 años. Cada año se
        
        
          producen entorno a 400 víctimas mortales entre los
        
        
          jóvenes, mientras que entre los mayores de 65 años
        
        
          se producen 500 víctimas mortales.
        
        
          En 2011, el número de conductores mayores de
        
        
          65 años aumentó un 3% con respecto al año 2007.
        
        
          Las personas mayores de 64 años representan el 17%
        
        
          de la población española, el 12% del censo de
        
        
          conductores y suponen el 23% de los fallecidos y el
        
        
          14% de los heridos por accidente de tráfico.
        
        
          El uso habitual del vehículo particular como
        
        
          medio de transporte entre las personas de avanzada
        
        
          edad, así como la realización de viajes más frecuen-
        
        
          tes son factores a tener en cuenta a la hora de
        
        
          pronosticar una mayor frecuencia de personas
        
        
          mayores en las carreteras.
        
        
          
            40
          
        
        
        
          
            Nº 58 - Octubre / Diciembre 2013
          
        
        
          Envejecimiento de la
        
        
          población y seguridad vial
        
        
          E
        
        
          Los conductores de avanzada edad con frecuen-
        
        
          cia conducen vehículos “más viejos”, este hecho
        
        
          los coloca en desventaja en caso de colisión,
        
        
          particularmente teniendo en cuenta su mayor
        
        
          fragilidad física.